Una cruz de Jacquard, un molino de agua, una herrería, un horno común. ¿Ve todos estos tesoros a su alrededor? Cada uno de ellos es un testimonio de la historia de Carladès, un territorio que ha conservado sus tradiciones y autenticidad. Le dejamos descubrir nuestra herencia, le seducirá, ¡Eso es seguro!
El molino ha sido renovado y hay senderos peatonales que permiten el acceso a lo largo de parte del río Cère. Los más pequeños pueden correr por el camino e incluso acercarse a algunos patos, para los más mayores: relajación y descanso garantizados.
Edificio de principios del siglo XV formado por un coro cuadrado y una nave formada por dos tramos ligeramente barlongos. La iglesia está calificada como Monumento Histórico.
Típica del territorio, esta iglesia es una visita obligada en Carladès y le sorprenderá la riqueza de sus decoraciones, sus techos de piedra y su campanario.
Esta iglesia es especialmente famosa por su pórtico del siglo XVI, calificado como Monumento Histórico. También merece la pena visitar su coro y su campanario del siglo XIII.
La iglesia fue mencionada por primera vez en 1266 y se unió a la de Murat en 1598. El conjunto tiene elementos románicos por una parte y góticos por otra. El portal tiene una decoración cargada.
La iglesia data del siglo XII y conserva su aspecto románico, con una única nave sostenida por contrafuertes. Para poder visitar la iglesia, pída la llave a los dueños de la casa de enfrente.
Déjese seducir por el encanto de esta iglesia y no se pierda el interior con un altar donado por Ana de Austria, el retablo calificado y una estatua de Cristo sentado.
La Iglesia de Saint Pierre domina con orgullo el centro histórico de Vic sur Cère. Ha sido destruida, reconstruida, ampliada y renovada, lo que hace que sea muy interesante visitarla. ¡Siéntete libre de abrir la puerta!
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